Jueves, 6. – Conceden el Nobel de Literatura al poeta Tomas Tranströmer.La casa huele a canela y a mermelada de ciruelas. Es un olorque, como la música en el poema «Allegro» del premio Nobel, se filtraa través de las paredes, de las ventanas sin romper los cristales. Unolor que trae entre su pico el recuerdo de una madre, de una ciudadgris y agobiante, de una infancia feliz, con días fríos con la escarchapegada en los cristales del balcón. Otra música, el aria de AndreaChenier, «Come un bel dì di maggio», cantada por Ben Heppner,unta la casa de niebla. Fuera la noche tiene una claridad de nochesanta, ya el otoño a las puertas, caballo ocre con herrajes de platasucia. Hace años, cuando descubrí a Tranströmer, fue como descubriruna nueva estrella, un imán orientado a la noche, a la música,a la claridad, al paisaje, a la pintura. Ya es un nombre cincelado enpiedra y ya ha perdido la fuerza del anonimato, la magia de lo pococonocido, de lo minoritario.(De Nueva York a diario, octubre, 2012).
Friday, March 27, 2015
Una nueva estrella: TT
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Hermoso, Hilario. Oportuno recuerdo. Abrazos.
ReplyDeleteMuchas gracias, Alvaro.
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